El tema elegido para la edición de 2018 ha sido la música. Además de los bloques temáticos de cortos musicales o en los que la música es protagonista, en la sesión inaugural se proyectó «Vivaldi’s Four Seasons Animated», una suerte de animación producida por la Universidad de las Artes de Tokio para acompañar las afamadas «Cuatro estaciones» correspondientes a los conciertos de violín compuestos por Antonio Vivaldi allá por el siglo XVIII. Fue la sinfónica Julià Carbonell de les Terres de Lleida la encargada de interpretar en vivo los conciertos completos mientras se proyectaba la animación. La actuación de la orquesta fue espectacular, memorable y preciosa. En cuanto a la proyección, pues muy bien vas a tener que hacerlo si pretendes poner imágenes a una de las mayores obras maestras de la música de todos los tiempos…
En fin, una vez superado el trámite de la inauguración, el Animac desplegó el amplio abanico de su programa que, sin ser excesivo ni una locura, se hace imposible de seguir en su totalidad para un común mortal, pues en línea con lo que ha venido ofreciendo otros años este festival, es un festín de cortometrajes y películas de diversas nacionalidades y técnicas acompañadas de múltiples actividades que, sin interrupción y solapándose, nos mantiene ocupados desde las 10:00 de la mañana hasta la medianoche.
Sobre la edición anterior ya mencioné que podría ser interesante el incluir algún concurso o participación del público con votaciones. Sigo pensando igual. También haría hincapié en el programa sobre la cantidad de cortos totales, cuantos por país, por técnica, por versiones (de poemas, cuentos, etc.) y adaptaciones. Pienso que una de las grandes aportaciones, a parte de la calidad, son la variedad y cantidad. Además, el precio de la entrada es muy económico: tan sólo 9 euros la entrada general para todas las sesiones de un día.
Me alegra particularmente observar una mayor participación de mujeres en los cortos presentados. Esto me hizo pensar en la conferencia que dio Chelo Laureiro en Mecal el año pasado tratando éste y otros temas. También pensé en ella por el inolvidable corto Decorado, que considero muy superior al que produce en esta edición: El muro interminable.
Aunque la afluencia de público fue mayor que el año pasado, sigo pensando que puede faltar hacer aún más difusión del festival. Ayer leí en La Vanguardia que se cerró esta 22ª edición con una asistencia en torno a las 30.000 personas, con un total de asistencia a proyecciones de 12.800 espectadores.
¿Por qué vale la pena este festival?
Sencillamente, porque es el mejor festival de cortometrajes de animación que podemos encontrar en el país. El Animac nos da accesibilidad a gran variedad de contenidos alternativos de gran calidad, difíciles de encontrar y ya seleccionados (sólo lo mejorcito). El precio es realmente asequible y el entorno del festival es muy agradable, contando además con muy buenas instalaciones, donce cabe destacar por su belleza la impresionante sala principal de la Llotja de Lleida.
Aprovechando al máximo y con ganas de más, pude ver casi un centenar de cortometrajes de los cuales prácticamente la tercera parte eran franceses. Impresionante fue para mí que ninguno de ellos coincidiera con los vistos en otros festivales a los que he asistido, que no son pocos. Por si alguien se quiere entretener viendo un ejemplo de las diferentes nacionalidades presentadas (lo que yo vi) :
En Sección Curts y White Cube, vi 48 cortometrajes que por países fueron: Brasil (2), EEUU (2), Rusia (1), España (6), Colombia (1), Francia (16), Estonia (1), Portugal (1), Bélgica (2), Líbano (1), Austria (1), Alemania (2), Canadá (1), Noruega (1), Rumanía (1), Suecia (1), Irlanda (1), Inglaterra (2), México (2), Grecia (1) y Macao (1).
En sección Petit Animac vi 20 que en detalle fueron: España (2), Francia (3), Estonia (1), Nueva Zelanda (1), Rusia (3), Alemania (1), Canadá (2), India (1), Inglaterra (2), Chequia (1), Suiza (1), Hong Kong (1) e Irán (1).
En sección Curts Random (en el Cafè del Teatre) la calidad era muy inferior a la mostrada en el festival y tal vez esto influya negativamente en que alguien se replantee el pagar para entrar a las secciones oficiales. También es cierto que esta muestra es gratuita. Pude ver un total de 11 cortometrajes, que por países fueron: Costa Rica (1), Vietnam (1), Estonia (1), Japón (1), Inglaterra (1), México (1), Países Bajos (1), Suiza (2) y Hong Kong (2).
A parte el especial de la Guerra Civil española, donde se proyectaron animaciones de: España (2), Francia (1), Finlandia y Chequia (1).
Es realmente un festival internacional.
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