Dangerous Animals

Película de Sean Byrne, España, 2025

Sinopsis

Cuenta la peligrosa odisea de Zephyr, una surfista que es retenida por un asesino en serie obsesionado con los tiburones

Crítica

La película es clara en todo momento en sus intenciones y lo que nos ofrece. Arranca muy fuerte, mantiene el ritmo y tiene un buen clímax. No deja de ser una película de verano de tiburones, pero muy efectiva. Sin ser excelente está muy por encima de la media de este tipo de producciones. Pocos personajes, tensión, buena música, buenas interpretaciones en general,… En mi caso me gusto también porque me recordó a cuando estuve en una jaula con tiburones en Argentina. En aquellos tiempos te daban algún diente de recuerdo.

Es entretenida abordando con cierto realismo la relación entre el ser humano y su entorno, pero echo en falta más ciencia. El personaje de Tucker (Jai Courtney), que esta fantástico, podría haber tirado más de curiosidades y conocimientos propios de alguien obsesionado por estas criaturas. Creo que la naturaleza da más juego y otros animales podrían haber aparecido en la historia.

El título es muy apropiado. La película situa a las personas en el grupo de los animales peligrosos, siendo las más peligroso por su capacidad de imaginar, crear y, sobretodo, justificar cualquier acto. Como todas las películas de esta temática hay momentos escasamente creíbles, pero se disfruta igualmente si estamos por ello. Zephyr, Hassie Harrison, interpreta correctamente a una mujer combativa, decidida, resolutiva y fuerte, llegando a extremos que, como indicaba, son poco creibles pero, al menos, posibles.

La fotografía es muy buena, con planos generales muy amplios que empequeñecen y aíslan a los personajes que difícilmente podrán ser vistos…y oídos. En comparación con el entorno, y los animales que comparten plano, el ser humano es inmensamente vulnerable. La cámara sabe transmitir la sensación de amenaza en todo momento.

Me llamo la atención cuando Tucker (Jai Courtney) le dice a uno de los personajes algo así como “finges y dices que no quieres mirar, pero en el fondo sabemos que quieres hacerlo” que podría interpretarse como un guiño al propio espectador (que ha mordido el anzuelo eligiendo ver esta película).

Muy acertados los carteles con esa aleta de sangre (y agua del mar) o mostrando a las víctimas como marionetas entre el psicópata y los tiburones. En fin, una survival movie con su típica final girl correcta que en diversos momentos me recordó a Wolf Creek pero en el agua. Sin dudarlo, una opción a considerar para disfrutar de un “buen” rato viéndola en la gran pantalla.

Llega a salas el próximo 14 de agosto. Dirigida por Sean Byrne se estrenó en la última edición del Festival de Cannes dentro del Director’s Fortnight, Special Screenings